Una vez que ya estaban lavadas y preparadas nuestras verduras...las llevamos al patio central del cole y las pusimos a la venta.
Julio, nuestro maestro de taller nos dijo que el precio sería...la voluntad.
Hoy hemos aprendido que eso significa que cada un@ da lo que quiere. Algunas personas se han extrañado y no sabían cuánto darnos, porque no están acostumbradas a que eso sea así, pero era el deseo de nuestro maestro.
Para vender, esta mañana hemos recolectado de nuestro huerto: Lechuga romana y lechuda de hoja de roble, habas, acelgas , cebollas y un calabacín.
La tienda la preparamos antes del recreo y dejamos este cartel...
Nosotr@s éramos los que vendíamos y manejábamos el dinero, con supervisión.
Queremos agradecer a todas las personas que se han acercado a nuestra tienda, su colaboración.
Les hemos explicado a nuestr@s clientes la diferencia entre la lechuga romana y la lechuga de hoja de roble. Esta última no da gases. Ha sido muy demandada por nuestr@s clientes.
Cuando nos quedaban pocas verduras y ya nadie venía a nuestra tienda...se nos planteó un problema.
Tenemos que venderlo todo hoy porque si no se estropea...¿Qué podemos hacer?
Y así surgió: La venta ambulante, fuimos ofreciendo los productos a los diferentes profesionales.
Aquí estamos en la cocina con Javi, nuestro cocinero.
Después de venderlo todo, hemso tenido que contar el dinero para saber cuánto habíamos ganado , el maestro Julio nos ha explicado que teníamos que clasificar las monedas que fueran iguales , después hacer montones que sumaran 1 euro y finalmente contarlo todo. Hemos obtenido 43,50 euros. Más 5 euros por las cebollas, que se vendieron después, porque estaban secándose en el taller. En total 48,50 euros.
Ha sido una experiencia genial!!! List@s para repetir cuando tengamos nueva cosecha.